Cuando emigras, son muchas las cosas que pueden preocuparte, temas como: me gustará el lugar, conseguiré amigos, cuál es el mejor sitio para vivir, conseguiré trabajo; muchas de estas incertidumbres convergen en un punto: DINERO.
Dicen que el dinero no hace la felicidad, pero sin duda, tener dinero, te permite tomar decisiones y ampliar tus opciones.
Cuando emigras, el mejor consejo que te podemos dar es: Controla tus gastos.
Para ello se hace imprescindible que realices un presupuesto y que hagas una buena búsqueda de acuerdo a los ahorros que has traído y a los ingresos que tienes, si ya tienes trabajo, del costo de los servicios y de los compromisos que vas a asumir.
Existen varias páginas en internet, conocidas como comparadores, donde puedes simular el costo de servicios como: la luz, el gas, telefonía, entre otros, ahí podrás ver cuál es el prestador del servicio que más te conviene.
Por otra parte, no te dejes deslumbrar por las compras y la fiesta, entre caña y caña y los gastos hormigas, se te puede ir el dinero y no darte cuenta.
España, no es tu país de origen, dejar de pagar los compromisos te puede generar consecuencias que pueden dificultar tu proceso de adaptación e inclusión. Evita los ficheros de morosos, como ASNEF, pagando a tiempo tus servicios o cualquier compromiso adquirido.
Recuerda, haz un presupuesto y controla tus gastos.